Por primera vez en nuestro país, una organización de la sociedad civil promueve la incorporación de la Educación Digital Integral en la agenda legislativa argentina. Se trata de una propuesta impulsada por Grooming Argentina, la organización pionera en la lucha contra la violencia sexual a niñas, niños y adolescentes en el entorno digital, que busca transformar la manera en que el Estado responde a los desafíos del siglo XXI.
La presentación se realizó en el marco del V° Encuentro Nacional de Legisladoras y Legisladores Provinciales y Nacionales, organizado por la Defensoría de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la Nación, un espacio estratégico de debate y construcción legislativa que reunió a representantes y especialistas de todo el país.
Un nuevo paradigma: derechos digitales como derechos humanos.
“Hoy, más del 90% de las infancias argentinas acceden a Internet antes de los 11 años. El territorio digital ya no es un escenario paralelo: es parte constitutiva de la vida, la educación, el juego, la identidad y la socialización”, afirmó Hernán Navarro, Director Ejecutivo de Grooming Argentina, durante su intervención en el encuentro.
Desde 2022, cuando la organización presentó esta propuesta en la Cumbre de las Américas espacio en el que Navarro dialogó con autoridades internacionales como la entonces vicepresidenta de Estados Unidos, Grooming Argentina ha venido instalando la urgencia de que el Estado reconozca la educación digital como un derecho y una herramienta estratégica para prevenir delitos, promover derechos y fortalecer la ciudadanía digital desde la infancia.
“Así como en el siglo XX debatimos el derecho a la educación, la salud o la identidad, en el siglo XXI debemos garantizar el ejercicio de los derechos digitales de niñas, niños y adolescentes. Sin ellos, el resto de los derechos se ve amenazado en este nuevo ecosistema”, destacó Navarro.
Hiperconectividad e hipervulnerabilidad: un diagnóstico alarmante
En Argentina, 4 de cada 10 niños reciben su primer dispositivo móvil antes de los 9 años, y pasan en promedio 7 horas diarias conectados a Internet. Este fenómeno de hiperconectividad, advierten desde Grooming Argentina, “se convierte en hipervulnerabilidad cuando no existen políticas públicas que acompañen, regulen y eduquen”.
La respuesta estatal sigue siendo insuficiente: leyes pensadas para un mundo analógico, ausencia de programas integrales de alfabetización digital y estrategias centradas en la prohibición —como retirar dispositivos de las aulas— en lugar de la promoción.
“Regular no es prohibir. La solución no es sacar a los chicos del mundo digital, sino garantizar que puedan habitarlo con derechos”, sostuvo Navarro.
Además, resaltó que “la violencia sexual hoy no necesita contacto físico: si tienen sus fotos, los tienen a ellos”, recordando la necesidad urgente de actualizar el marco legal frente a nuevas formas de delito como el grooming, la sextorsión y la difusión no consentida de imágenes íntimas.
Un llamado a la acción: el rol del Congreso
La iniciativa de Grooming Argentina plantea un objetivo claro: que la Argentina lidere en la región la incorporación de los derechos digitales de las infancias a su legislación.
“Tenemos la oportunidad y la obligación de construir un marco legal que contemple este nuevo territorio. Proteger a un niño hoy también implica proteger su huella digital”, concluyó Navarro.
La propuesta de Educación Digital Integral busca trascender la lógica reactiva frente al cibercrimen y la pedofilia, y avanzar hacia una política pública de prevención, cuidado, alfabetización y uso positivo del ecosistema digital. En un mundo en el que casi todas las violencias tienen algún tramo en línea, garantizar derechos en el entorno digital ya no es una opción: es una necesidad impostergable.